En Sicko, de Michael Moore:
Mi madre era una estudiosa de la Biblia, así que la leíamos todos los días. Ella me enseñó algo que marcó mi vida: “La Biblia es la historia de los reyes, que tenían el poder, y los profetas, que enseñaban la verdad”. Y me enseñó también que debía apoyar a los profetas, no a los reyes. Y aunque hacerlo me haya traído muchos problemas a lo largo de mi vida, creo que tenía sentido, y lo tiene más aún hoy en día.
Lo dice Tony Benn, en uno de los extras del DVD.